En un par de días han ocurrido dos incidentes, uno en el sur y otro en el centro, de las mismas características:
A pedradas, golpes y patadas, sin ningún tipo de miramientos cuando se ve delante a los cuerpos de seguridad del estado. Y no hablo de los grupos antisistema ni nada parecido, si no de colectivos que protegemos y amparamos bajo el estado del bienestar.
Alguna reflexión deberían hacer los que mandan ante este tipo de acontecimientos, a lo mejor es que algo se está yendo de las manos. Quien sabe.